El viernes pasado los latinajos protocoleros nos recordaban que hay que aceptar y agradecer todos los regalos. Con esa idea en mente escribiré dos entradas en este blog, por dos regalos que he recibido relacionados con un tema que me gusta: la heráldica.
Unos cuantos años separan al primer y segundo regalo, lo he echado a suerte y le ha correspondido el primer lugar al más reciente, así que de él les hablaré en esta entrada.
Fue cerca de Navidad cuando recibí un regalo, inesperado y maravilloso: unas láminas con dibujos originales a todo color de la Historia del Escudo de España, o para ser más precisos, de los distintos escudos que, con el tiempo han servido de base para componer el que hoy es nuestro escudo. Los dibujos iban acompañados de unas fichas cuidadosamente mecanografiadas con la descripción heráldica y un escudo dibujado a lápiz, a modo de borrador del que luego se pinta a todo color.
Esta obra de arte, porque así hay que definir los dibujos de los escudos que parecen salidos de un códice miniado, fue realizada por Casildo Román, tío abuelo de Miguel del Amo. Miguel los recibió de su madre y ahora están en mi casa gracias la generosidad de Miguel.
Como les decía son una auténtica joya, tanto por la calidad del dibujo -que recoge hasta el más mínimo detalle a tamaño 9,5 X 7,5 cm.- como por la ficha descriptiva catalogada que los acompaña.
Pensaba utilizar los dibujos para hacer una descripción heráldica de acuerdo a mis conocimientos y “tirarme el pisto”, que decían los modernos de mi época allá por los años 80 del siglo pasado, pero lo he pensado mejor y prefiero que sea el propio Casildo quien lo haga. Transcribo dos de las fichas correspondientes a los dos escudos que -junto a su borrador- aparecen en la imagen destacada de esta entrada.
Primer escudo de los Reyes Católicos (1475-1492)
“En virtud del matrimonio de don Fernando II de Aragón y doña Isabel I de Castilla, se unen los reinos de ambos, y los blasones de cada uno de ellos se funden en un escudo, que puede considerarse al base de los siguientes de España y en el que se han inspirado para la confección del actual.
El primer escudo puede describirse así: escudo cortado; mitad superior cuartelado, 1º y 4º de gules y un castillo de oro, almenado de tres almenas con tres homenajes, la del medio mayor y cada homenaje con tres almenas, mampostado de sable y aclarado de azur que es el de Castilla; 2º y 3º, de plata y un león de gules, coronado de oro, lampasado y armado de lo mismo, que es de León.
Mitad inferior: partido, primero de oro y cuatro palos de gules, que es de Aragón; segundo: jefe y punta de oro y cuatro palos de gules, flacos de plata y águila de sable, coronada de oro, picada y membrada de gules, que es de Sicilia.
Timbrado con corona real antigua, y, el todo sobre el águila de San Juan, pasmada, de sable, nimbada de oro, con el pico y las garras de gules; éstas armadas de oro.
A la derecha de la cola del águila, un yugo de gules, con sus cintas de lo mismo y a la izquierda, un haz de flechas de gules, con sus cintas de lo mismo”.
Segundo escudo de los Reyes Católicos (1492-1504)
“Con la conquista de Granada, queda de nuevo reorganizado el escudo, sin otra variación que la de incluir entado en punta el significativo emblema del reino andaluz. Por excepción, en algún ejemplar, como el del Salón de Embajadores del Alcázar de Sevilla, la granada ocupa el centro, abismo o corazón del escudo”
Regalos que acepto encantada y agradezco de corazón
“A mi tío abuelo le gustaba la Heráldica y hacía esto, te va a encantar” fueron las palabras de mi amigo Miguel cuando puso en mis manos una carpeta llena de dibujos de escudos y textos escritos, en cuartillas cuidadosamente mecanografiadas (como mínimo en una Hispano-Olivetti M40). Regalos así son los que me gustan y acepto encantada.
¡Gracias, hermano!