El 2 de mayo de 1814 tuvo lugar en Madrid la primera celebración en recuerdo de quienes dieron su vida el 2 de mayo de 1808 en el que el pueblo de Madrid se sublevó contra el invasor francés y comenzó la Guerra de la Independencia. Aquella conmemoración no fue un acto alegre y festivo, si no un acto luctuoso.
Aquel 2 de mayo de 1814 se produjo la exhumación y traslado de los restos de los héroes del 2 de mayo de 1808, desde sus lugares de enterramiento en distintos puntos de la ciudad, hasta la Iglesia de San Isidro. Los restos de los dos más nombrados, Daoiz y Velarde, que previamente habían sido exhumados en la cripta de la Iglesia de San Martín, desde el cuartel de Artillería. Fue el primer movimiento de varios que se produjeron en sucesivos años y se hacía en una España a la que le quedaban dos días de constitucionalismo.
Cinco fechas para contextualizar el momento histórico
Recordemos, a grandes rasgos, en qué momento de la historia estamos:
- En diciembre de 1813 se había firmado el tratado de Valençay, mediante el que Napoleón reconocía a Fernando VII como rey de España y se le restituía como soberano (este tratado no fue ratificado por las Cortes de Cádiz).
- En enero de 1814 las Cortes, la Regencia y las autoriades constitucionales llegan a Madrid desde Cádiz.
- El 24 de marzo de 1814 Fernando VII entró en España acompañado por su hermano, el infante D. Carlos.
- El 4 de mayo de 1814, mediante el conocido como Decreto de Valencia, Fernando VII abolió la Constitución de 1812, restaurando el absolutismo y el Antiguo Régimen.
- En junio de 1814 el ejército francés abandonó definitivamente España.
Las Cortes planifican un gran acto de protocolo en conmemoración del 2 de mayo
El 23 de marzo de 1814 un decreto de las Cortes daba las indicaciones oportunas para que el acto de conmemoración de los héroes se llevase a cabo. Indicaba: el objetivo del acto; la fecha; qué se iba a hacer; cómo se debía de hacer, quienes debían necesariamente asistir; dónde y qué tipo de ceremonia. Dejaba para el futuro la construcción de un monumento conmemorativo en recuerdo de quienes se levantaron contra el invasor y la elaboración del epitafio de la urna en la que yacerían los restos en la Iglesia de San Isidro.
El texto del Decreto decía lo siguiente:
Deseando las Cortes celebrar de un modo digno de la Nación, a quien representan, la memoria del día dos de Mayo de 1808, con ocasión de ser el próximo primero de su instalación en la capital de la Monarquía, decretan lo siguiente:
1º) Se exhumarán con todas las ceremonias religiosas establecidas para el caso (…) los restos de los beneméritos D. Luis Daoiz y D. Pedro Velarde, y los de los valientes sepultados en el Prado de esta Corte y en la Florida; y se encerrarán en una caja, cuya llave se custodiará en el Archivo del Congreso Nacional.
2º) El terreno donde actualmente yacen las víctimas del dos de Mayo, contigua al Salón del Prado, se bendecirá, se cerrará con verjas, se adornará con árboles; en su centro se levantará una sencilla pirámide que transmita a la posteridad la memoria de los leales, y tomará el nombre de Campo de la Lealtad.
3º) El Ayuntamiento de Madrid cuidará de realizar lo prevenido en el artículo anterior, y de colocar en el cementerio de la Florida una lápida con una inscripción en honor de los que yacen en él, sacrificados al furor del enemigo.
4º) La caja que encerrare los restos respetables de los Adalides de nuestra santa insurrección, se trasladará el día dos de mayo próximo con toda la publicidad y pompa dignas de un acto tan solmene, a la Iglesia de San Isidro, en donde se celebrará un oficio de difuntos con una oración fúnebre.
5º) Una diputación de individuos del Congreso Nacional, autorizará la traslación dispensándose, como las Cortes dispensan para este solo caso, lo dispuesto en el artículo 29 de su reglamento interior.
6º) El Jefe político, la Diputación Provincial, el Ayuntamiento, el Gobernador Militar, el Estado Mayor de los Ejércitos, y todas las autoridades eclesiásticas, militares y políticas, residentes en esta corte, concurrirán a solemnizar el acto.
7º) Las tropas de la Guarnición harán los honores que la ordenanza señala a los Capitanes Generales de los ejércitos, a la memoria fúnebre de los ciudadanos españoles que en el día dos de Mayo de 1808 dieron la vida por defender la Religión, la libertad y el trono.
8º) En la Iglesia de San Isidro se levantará un sepulcro adornado con sencillez y elegancia, en el que se depositará la caja que encerrare las cenizas de los primeros mártires de nuestra santa insurrección.
9º) La Diputación del Congreso Nacional que hubiere asistido a la traslación de las cenizas y al oficio de difuntos, recogerá la llave de la caja donde se encerrarán aquellos, y la entregará a las Cortes en sesión pública.
10º) La Academia de la Historia formará la inscripción que, en nombre de la Nación se haya de poner sobre el sepulcro.
(11 a 17 se omiten)
18º) Las Cortes esperan que el Jefe Político con el Ayuntamiento de esta Corte, no omitirá medio alguno de cuantos estuvieren a su alcance para que la traslación de las cenizas y la función fúnebre del día Dos de Mayo próximo, se ejecute con toda la dignidad y magnificencia con que este heroico pueblo acostumbra a celebrar siempre las glorias de la Nación”.
Instrucciones de protocolo para el Ayuntamiento de Madrid
Al Ayuntamiento Constitucional de Madrid, se le trasladaron -mediante oficio del Sr. Jefe Político- instrucciones más precisas sobre ceremonial y protocolo “para celebrar de un modo digno de la Nación la memoria del día Dos de Mayo de 1808”. En los distintos párrafos del oficio se especifica cómo aquel solemne ceremonial se debía llevar a cabo. Exhumación, preparación y traslación, requerían un gran despliegue de medios. Había que establecer el recorrido y composición del cortejo fúnebre; las calles por las que desfilaría junto al carro triunfal que llevaba los restos; las construcciones de arquitectura efímera; la invitación al acto; distribución de autoridades en el cortejo; hora en la que había que citar a los asistentes; etiqueta requerida, etc. todo ello teniendo en cuenta que era un acto fúnebre (que en el texto denominan “función fúnebre”)
El texto de dicho oficio decía lo siguiente:
2º) El Ayuntamiento cuidará de que en el Prado y lugar en que fueron sacrificadas las víctimas del Dos de Mayo, se disponga una capilla con algunos altares, y en la tarde del día 1º de dicho mes, con asistencia del Ayuntamiento y del Reverendo Obispo Auxiliar, se procederá a la exhumación de los cadáveres, que serán colocados en el ataúd o urna dispuesta a este fin, que quedará al cuidado del mismo Ayuntamiento y de la guardia de una compañía de soldados con bandera.
3º) Inmediatamente que se haga la exhumación se anunciará con tres cañonazos, que no la muerte de aquellos valientes, la solemnidad de su traslación; y con uno cada media hora hasta que sean depositados en el sitio dispuesto en la Iglesia de San Isidro.
4º) En la mañana siguiente se celebrarán misas en los altares de la capilla, hasta que salga de ella el ataúd.
5º) El cuerpo de Artillería nacional cuidará de que los restos de Daoiz y Velarde sean exhumados en la misma tarde del día 1º de Mayo, con todas las solemnidades necesarias para justificar su identidad; y, colocados en dos cajas, serán conducidos, sin aparato, al Parque de Artillería, en donde se dispondrá algunos altares y se hará lo prevenido en los artículos 3º y 4º [anteriores].
(6º se omite)
7º) El Ayuntamiento convidará a las autoridades mencionadas en el Decreto de 23 de Marzo, para que asistan a solemnizar la función. Y reunidas en las Casas Consistoriales, vendrán, a las 9 de la mañana del Dos de Mayo, al Salón de Cortes (a donde concurrirá, igualmente, a la misma hora el cuerpo de Artillería) a buscar a la Diputación del congreso, y se dirigirán por la calle Ancha de San Bernardo al Parque de Artillería a recoger los ataúdes de Daoiz y Velarde, y desde aquí al Prado y sitio en que estará depositado el otro ataúd.
8º) El Ayuntamiento (…) y el cuerpo de Artillería, en cuanto a las cajas de Daoiz y Velarde, dispondrán todo lo conveniente para que, con arreglo a la ordenanza, sean conducidos con el aparato y honores determinados para los Capitanes generales con mando en Jefe que fallecen en plaza, procurando la uniformidad en todo. Y así, los caballos que conduzcan el carro triunfal con las cajas de los patriotas llevarán caparazones negros con las armas de Madrid; y los que conduzcan a Daoiz y Velarde con las de sus familias.
9º) En la capilla del Prado estará reunido el clero secular y regular, y se dirigirá toda la comitiva a la Carrera de San Jerónimo, Puerta del Sol, calle de Carretas, plazuela de Ángel y calles de la Concepción Jerónima y de Toledo a la Iglesia de san Isidro.
10) En esta iglesia habrá dispuesto un féretro en el cual se colocarán los ataúdes durante el oficio y misa de difuntos; y, concluida esta y dicha la oración fúnebre, se pondrán los ataúdes en los sitios en que han de quedar sepultados.
11º) Un destacamento de caballería precederá a la comitiva desde que la Diputación de Cortes salga de su Salón; a los lados de esta irán los alabarderos y detrás un piquete de Guardias Españolas.
12º) El Gobernador de la plaza dispondrá todo lo conveniente para que la tropa de la guarnición se tienda por las calles por donde han de transitar las cajas de los restos de las gloriosas víctimas del Dos de Mayo, y para que se haga a éstos los honores militares que las Cortes han decretado; procediendo así en esto, como en el orden militar de la marcha del entierro, con arreglo a la ordenanza.
13º) La Diputación del Congreso, que autoriza esta solemnísima función, irá vestida de luto riguroso.
Acto abierto a la participación ciudadana
Y el Ayuntamiento, como no podía ser menos, traslada todas estas indicaciones a los ciudadanos el 27 de abril de 1814, mediante un bando dirigido al “Heroico Pueblo de Madrid” en el que, además, hace una indicación de urbanidad.
El bando “invita y excita (…) cuanto es posible a la conmemoración y aniversario que ha dispuesto de tan memorable y nunca bien explicado día en los fastos de la historia (…) convocándote a la exhumación de los restos de aquellas apreciables víctimas en el punto del paseo del Prado donde fueron inmoladas y yacen sepultadas, el día 1º (…) y su conducción procesionalmente el DOS con el debido aparato (…) a la Iglesia de San Isidro (…) estando convidadas para mayor ostentación de tan digno acto, todas las autoridades y corporaciones eclesiásticas y seculares que dichosamente reúne este centro, para celebrar en dicha iglesia una solemnísima vigilia, misa y responso (…) dándose principio a las nueve de la mañana (…); la tropa de la guarnición tendida por la carrera igualmente que la que acompañe a las víctimas, y se tienda delante de la iglesia, observarán todo el rigor de la ordenanza funeral y hará los honores a las víctimas de Capitán general, contribuyendo a tal solemnidad los tiros y descargas de cañones con arreglo a la misma, y a los clamores generales de campanas que se repetirán en ambos días y noche intermedia (…) [Y solicita del pueblo] la observancia de la moderación, orden y fraternidad con la que ha de comportarse en la celebridad de tal día, excusando todo motivo de disgusto, alboroto, obscenidad e insulto”.
De aquellos actos quedan los dos grabados que acompañan a esta entrada como imagen destacada. Dos instantáneas del carro triunfal en el que se trasladaron los restos de Daoiz y Velarde, al que iba a ser su lugar de descanso definitivo en Madrid. Con la perspectiva que da la historia ahora sabemos que era solo la primera parada de un viaje que iba a durar unos cuantos años. Y también que, a aquellas Cortes y aquel Ayuntamiento constitucionales que aspiraban a una España más moderna le quedaban exactamente dos días para volver al absolutismo más rancio.
En este día recordemos a los héroes, sin perder de vista a los villanos.
Fuentes de texto e imágenes disponibles en la Biblioteca Digital Hispánica:
Carrasco y Saiz del Campo, Adolfo (1895) «El carro triunfal fúnebre de Daoiz y Velarde: memorias del Dos de Mayo«
Ciria y Nasarre, Higinio (1908) «Dos de Mayo en 1808 1908: noticias y apuntes coleccionados por Higinio Ciria y Nasarre».
Imagen destacada: elaboración propia
1 comentario
Pingback: 2023 ¿Qué se han contado los blogueros de protocolo y eventos en mayo? - Protocol Bloggers Point